.-"Alto, alto... ¡Que no nos quedan vírgenes!"
Hay una sequía de sangre brutal en las montañas. Los campesinos se han ido todos, o casi, No se pilla una moza de noche ni por caridad, y están todos los Vampiros desesperados, en eso que ven acercarse aleteando a Abdul, el único vampiro musulmán. Llega Abdul con los ojos inyectados en sangre, la sangre le corre por la boca, jadea y se sienta junto a los demás que le miran llenos de envidia.
¡¡¡Abdul!!!, Dínoslo, ¿donde lo has conseguido?
Y dice Abdul, vale, os lo diré. ¿Vosotros veis aquella pared del viejo Castillo, entre los árboles?-Todos al unísono ... Si!, claro que la vemos....
-Pues yo no la ví.
jueves, 21 de diciembre de 2006
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