viernes, 11 de diciembre de 2009

Que pare Aminetu, o Zetapé se pondrá malito

Estaban desaparecidos. El Ministerio de Propaganda y zejas varias apenas sacaba la cabeza de su madriguera para exigir el cierre de internet o apoyar a los hermanos Castro y sus secuaces. Pero lo de Aminetu Haidar, secuestrada por los gobiernos español y marroquí, pareció despertarles. Ni Obama explicándonos eso de las guerras pacifistas e invasiones "legales" les inquietaba, ese encendido canto al 9 milímetros Parabellum y elogio de Julio César. Se les ha sumado el Ministerio de Paz Social mientras prepara su insulto a los trabajadores y parados con una excursión de AVE y dietas para dar cariño al gran timonel, en vez de plaza de Oriente irán a la Puerta de Alcalá, miralá, miralá.

Pero no, no se confundan, los cinepastas del Ministerio de Propaganda junto al otro lobby que vive de la crisis, el Ministerio de Paz Social, no han salido defendiendo a la señora Haidar, sino al rescate del que paga, Zapaflower el civilizador. Solo faltan los banqueros, o no. Las resoluciones de la ONU son para legalizar la invasión de Afganistán, no para el referendum del Sáhara.


Se montaron otra orgía bolivariana en el Círculo de Bellas Artes para salvar la cara del gran timonel desviando las responsabilidades hacia el rey, ellos, esos convencidos monárquicos. Así compensan la intensa campaña del gobierno para convertir a Haidar de víctima en chantajista, y que la única "víctima" sea el líder supremo.
Allí estaban casi todos: Pedro Almodóvar, Juan Diego, Aitana Sánchez Gijón, Cándido Méndez, Ignacio Fernández Toxo, Juan Diego Botto, Fanny Rubio, Javier Bardem o Joaquín Sabina. Cuentan el bochorno en El Semanal Digital:
El acto, ante muy poco público, puede resumirse en pocas palabras: un intento por todos los medios de evitar cualquier tipo de reproche al Ejecutivo de Zapatero.
Pero llegó el turno de la prensa y las cosas empezaron a torcerse nada más formulada la primera pregunta, acerca de la opinión de los allí presentes sobre la gestión del Gobierno en este caso. "El acto de hoy es un acto civil, y lo enfocamos a la petición de que Aminetu siga viva. Esto es lo que habíamos acordado", cortó en seco el oscarizado director de cine.
Hubo más en esa línea, y siempre con parecidas respuestas. "No queremos entrar en llamadas a los ministerios", señaló Fanny Rubio cuando se les preguntó si con este gesto exigen al Ejecutivo que deje mediar al Rey (dado que horas antes se había conocido que es Zapatero quien de momento no quiere que intervenga Don Juan Carlos, como ya informó El Semanal Digital).
"¿Pidiendo la intervención del Rey, quieren dar a entender que no confían en el Gobierno español?", peguntó otro periodista. De nuevo, agua. Hasta que, cuando se formuló una cuestión sobre la opinión de los firmantes acerca de la posible alimentación forzosa de la saharaui por parte del Ejecutivo socialista, los ánimos de los protagonistas terminaron de encenderse y la propia Fanny Rubio advirtió: "Estamos entrando en otro tema. A partir de ahora os pido a los periodistas que al hacer una pregunta os presentéis con nombre y medio como hemos hecho nosotros", exigió. Cabe recordar que no hace mucho, en un acto con parecidos protagonistas y el mismo escenario pero a favor del boliviano Evo Morales, cuando una periodista de la COPE se identificó como tal el público comenzó a abuchearla.
No obstante, y ya sí previa identificación de los periodistas, las preguntas continuaron por parecidos derroteros, pero nadie se salió del guión: utilizar todas las vías posibles -en palabras del actor Juan Diego Botto- para lograr que Haidar vuelva a casa inmediatamente con su familia. Apenas transcurridos 45 minutos, y viendo que el interés de la prensa discurría por otro camino, Almodóvar decidió dar por terminado el acto. Porque, según el director de cine, algunos de los presentes tenían otros compromisos esa tarde. Aplausos y a otra cosa.

Hasta la próxima nunca mais, no a la guerra o para que no se aprovechen -otros- de la crisis, que para eso ya están ellos.

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